NAD C 558 Turntable

NAD C 558. Tecnología sofisticada

En el caso del C 558, hemos optado por utilizar una sofisticada fuente de alimentación que transforma la tensión alterna de CA de su enchufe de pared en una tensión de CC pura. A continuación, la tensión continua se regenera en una tensión alterna precisa que alimenta un motor de reloj de precisión para lograr una consistencia y suavidad de velocidad casi perfectas. El propio motor está aislado del ruido y las fluctuaciones de tensión que se producen en la red de CA sin filtrar y que pueden causar inestabilidad en el motor. El motor utiliza una correa de caucho especialmente desarrollada que está rectificada plana para mayor precisión e impulsa un subplato no resonante que también está mecanizado con precisión para una rotación suave. Este se asienta en un cojinete de latón con un eje de acero endurecido. Todas estas piezas se han desarrollado cuidadosamente para que funcionen juntas y proporcionen una rotación del disco extraordinariamente estable y precisa.

El tóner del C 558 también ofrece un nivel similar de cuidadosa ingeniería y desarrollo. Con una longitud de 9″, ofrece una baja distorsión de seguimiento a la vez que mantiene la rigidez y la baja masa necesarias para estabilizar el cartucho. Al permitir el ajuste VTF y Azimut, obtenemos un seguimiento preciso con baja distorsión y desgaste del disco.

El plato de vidrio y el zócalo macizo se combinan para extraer toda la energía del disco y aíslan las vibraciones externas no deseadas. Estos detalles aseguran aún más que su experiencia de escuchar en vinilo sea verdaderamente trascendente.

Piezas y materiales de calidad

El zócalo del C 558 es de MDF macizo, a diferencia de los tableros de partículas o plástico que suelen encontrarse por este valor, y está mecanizado por CNC para mayor precisión. La tapa guardapolvo del C 558 también es más pesada que la mayoría y está fabricada en metacrilato no resonante con un diseño de bisagra contrapesada que permite que la tapa permanezca en casi cualquier posición intermedia, desde abierta a cerrada.

Una experiencia como ninguna otra

Escuchar discos de vinilo es una experiencia envolvente. Uno se implica tanto en el proceso como en la escucha. En un grado mucho mayor que con las fuentes digitales, la reproducción de vinilos requiere una sólida precisión mecánica para extraer la música del soporte. Un disco reproducido correctamente es una experiencia fantástica y gratificante, y el NAD C 558 tiene todo lo que necesita para disfrutar al máximo con el mínimo esfuerzo y gasto.